No solo armas, Ucrania tambien necesita protesis para mutilados “en estos tiempos dificiles”
DNIPRO, Ucrania – Los militares ucranianos repiten que necesitan que otros paises les envian armas, pero en el caso del centro de rehabilitacion de mutilados en Dnipro lo que esperan son protesis, pues ahora tiene mas del doble de pacientes que antes de la guerra.
“Antes recibiamos entre 70 y 80 por mes. Ahora hasta 200 o 250, con una importante tendencia al alza”, asegura a Efe Oleksiy Shtanko, director de la Planta Protesica de Dnipro, una ciudad en el sureste de Ucrania a donde llegan muchos de los heridos en el frente.
La ayuda del exterior es esencial “en estos tiempos dificiles”, subraya, mientras observa a un par de pacientes que hacen ejercicios para aprender a andar con sus protesis en las piernas.
Al centro le llega de todo, desde niños pequeños a ancianos, con mutilaciones menores y mas graves, pero tienen protesis para todos ellos, desde las que les piden por razones de estetica a otras mas complejas con inteligencia artificial.
Cualquiera puede acudir tras solicitarlo a traves de un servicio publico de Proteccion Social, para recibir asistencia gratuita, tanto para elaborar la protesis como para su estancia durante la rehabilitacion.
Les llegan ayudas, “pero me gustaria ver mas, dada la cantidad de solicitudes que recibimos ahora”, confiesa.
“Se hablo de 4,000 millones de dolares y en cuatro o cinco años no han destinado nada”, critico y agrego que “autorizaron 40,000 millones de dolares para armas a Ucrania”.
El centro necesita una ampliacion y hace falta dinero, o el envio de cualquier material, desde camas a maquinaria de ortopedia, para recibir mas militares heridos y tambien a civiles, para ayudar “a un mayor numero de personas”, añade.
La guerra ha obligado a acelerar su trabajo, pues antes les llevaba un par de meses elaborar cada protesis, a medida de cada paciente, y ahora tardan solo uno.
Antes las amputaciones eran por causas como accidentes laborales o de trafico, ahora muchas mas por las heridas de la guerra, explica.
Una ronda de misiles rusos golpeo el domingo de madrugada la capital de Ucrania y alcanzo objetivos de “infraestructura” no especificados, segun el alcalde de Kiev. No se reportaron muertes, aunque una persona estaba hospitalizada por heridas.
Shtanko destaca que los menores costes, por ejemplo en salarios, hacen que una protesis en este centro resulte tres veces mas barata que lo que puede costar en otros paises de Europa, donde puede superar los 10,000 euros.
Con ese dinero aqui tienen para tres, contando todo el proceso desde su fabricacion hasta completar la rehabilitacion, que en el caso de las piernas “es rapido, en tres o cinco dias se aprende a andar de nuevo”, comenta.
Pero para el, mas que el dinero lo que importa es el resultado, que quien acude a ellos salga satisfecho.
Familias enteras cocinan como pueden, y ven pasar los dias sin que llegue el momento.
Olexandr sonrie despues de mostrar su habilidad jugando al tenis de mesa con su fisioterapeuta. La raqueta la lleva pegada con cinta de embalar a su mano sin dedos.
Los perdio hace unos años, junto con sus piernas, despues de que se congelaran cuando lo dejaron a la intemperie un dia de invierno tras recibir una paliza, relata a Efe.
Desde los 17 años lleva en rehabilitacion, con “entrenamientos para todo, pero lo acaban de ver, aqui aprendi incluso a jugar al tenis de mesa”, dice sin perder la sonrisa.
Las nuevas sanciones impuestas por la invasion rusa a Ucrania incluyen ademas a Serguei Roldugin, considerado el custodio de la fortuna del presidente Vladimir Putin en el exterior.
Cuando tenga sus protesis para las manos, espera que en dos meses haya aprendido a vivir con ellas, al igual que ya se maneja con las de sus piernas.
El centro se va preparando para cuando lleguen militares y tambien civiles con mutilaciones durante la guerra, para que comiencen su rehabilitacion mientras ahora van preparando sus protesis, cada una de forma manual, a medida y con el nombre de cada persona que las espera.
“Personalizada hasta en el color de su piel, incluso de sus uñas”, apunta un empleado mientras muestra un brazo de plastico.
El voluntario de la Cruz Roja rompio en lagrimas al hablar de los niños que han fallecido en Ucrania y Uvalde.
Tienen preparada tambien una habitacion para niños, una cocina donde los pacientes aprenden a convivir con sus nuevas manos para retomar su vida, a como abrir una puerta o poner una bombilla.
Pero necesitan unas barras adaptables a la altura de cada paciente que tiene que volver a aprender a andar, pues las que tienen ahora son fijas.
Ivan, un hombre de 77 años al que le amputaron las piernas tras una trombosis; Volodimir, de 42, que perdio una de ellas en un incendio en su casa; o Olexandr, de 49, al que se la cortaron por gangrena, confian en que la ayuda llegue, mientras esperan en la habitacion que comparten en el centro.
A ellos se sumaran los que vayan llegando cuando sus protesis esten listas para reemplazar piernas y brazos perdidos por la guerra.